La Justicia rusa anuló el primer matrimonio de personas del mismo sexo después de que se prohibiera por ley el cambio de género tanto en el quirófano como en los documentos de identidad, lo que ha generado críticas por parte de la comunidad transexual.
El tribunal de la ciudad de Irkutsk, Siberia, tomó esta decisión en respuesta a una denuncia presentada por la Fiscalía a petición del registro civil. Esta medida crea un precedente significativo en la Federación Rusa.
La nueva ley prohíbe cualquier intervención médica para el cambio de sexo, dejando solo excepciones para el tratamiento de anomalías congénitas y enfermedades genéticas y endocrinas en niños, bajo la decisión de una comisión médica.
Además, la legislación establece que el matrimonio será anulado si uno de los cónyuges se somete a una reasignación de sexo.
La controvertida reforma constitucional de 2020 definió el matrimonio como una unión exclusiva entre un hombre y una mujer.
El cambio de sexo en documentos oficiales estaba permitido en Rusia desde 1997 sin necesidad de someterse a una operación. Sin embargo, con esta nueva ley, los transexuales enfrentan mayores restricciones y consecuencias legales, lo que ha llevado a algunos a considerar el exilio como única opción viable.
La ley también prohíbe a las personas que hayan cambiado de sexo adoptar niños o ser tutores o fideicomisarios. El número de solicitudes para el cambio de sexo en 2022 se estimó en 996 según el viceministro de Sanidad ruso, Oleg Salagái.
Esta medida ha generado preocupación y controversia tanto dentro como fuera del país, ya que impacta los derechos y la libertad de la comunidad transexual en Rusia.