Además de su proyecto para desviar las aguas del río Masacre mediante la construcción ilegal de un canal en Juana Méndez, ciudadanos haitianos están extrayendo grandes cantidades de arena del lecho del río. En la zona de La Sal y Los Cartones, se observa a haitianos usando cubetas para extraer arena, que luego amontonan en la orilla y transportan en camiones.
Este acto está causando un grave daño ambiental al río Masacre, afectando la biodiversidad, la claridad del agua, los niveles freáticos y el paisaje circundante. A pesar de estos impactos negativos, la inestabilidad política, la crisis y la inseguridad en Haití dificultan los esfuerzos de las autoridades ambientales para proteger el río.
El ingeniero Arturo Sosías, exgobernador de la provincia Dajabón, ha calificado esta extracción de arena como uno de los mayores crímenes ambientales actuales, instando al Ministerio de Medio Ambiente a cooperar con sus contrapartes haitianas para preservar el río.
El líder comunitario Héctor Valerio también ha instado al gobierno a no centrarse únicamente en la construcción del canal en Juana Méndez, sino a prestar atención a la extracción de arena para evitar que el río se seque por completo.
Título destacado: «Haitianos Extraen Arena del Río Masacre, Agravando el Daño Ambiental»