El exponente de música urbana José Fernando Cosculluela Suárez hizo alegación de culpabilidad en 13 cargos por violación a la Ley 54 para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica contra su exesposa tras alcanzar un acuerdo con el Ministerio Público.
Además, le fueron archivados los cargos por violar los artículos 6.09 (portar un arma semiautomática sin licencia) que conlleva una pena mínima de cárcel de 18 años y el 6.14 (apuntar o disparar un arma de fuego) de la Ley de Armas.
La jueza Mariseli Rosario Figueroa, del Tribunal de Humacao, citó la vista de lectura de sentencia para el 20 de abril, pues no irá a juicio.
El cantante salió del tribunal sin el grillete que utilizaba para su supervisión electrónica mientras se mantuvo en libertad bajo fianza de $240,000.00 y expresó que se sentía feliz tras la decisión.
“Siempre estuve confiado en la justicia de Puerto Rico”, sostuvo.
La licenciada Joan Hernández, portavoz del Departamento de Justicia, indicó que Cosculluela Suárez se expone a tres años por cada uno de los 13 cargos por violencia de género, por lo que, dependiendo de la determinación de la jueza en la vista de sentencia, podría recibir entre tres años (si la sentencia es concurrente) a 39 años de prisión (si la sentencia es consecutiva).
Hernández añadió que se refirió el caso para la preparación del informe presentencia correspondiente a modo de auscultar si cualifica para cumplir la sentencia que se le imponga en probatoria y no mediante un programa de desvío. De no cualificar para probatoria, Cosculluela Suárez tendría que cumplir la sentencia impuesta en prisión.
Durante la mañana, la jueza Yumayra Serrano Murcelo determinó causa para juicio, contra Cosculluela Suárez, tras este allanarse y renunciar a continuar con el proceso de vista preliminar.
El licenciado Carlos Aponte Nieves había anticipado que se trataba de una alegación mediante un preacuerdo amparado en la Regla 72 de Procedimiento Criminal, que Cosculluela Suárez sería referido a un programa especial de desvío y que no se contemplaba que cumpliera cárcel, lo cual no logró.
Cuando las partes comparecieron esta tarde a la sala de Rosario Figueroa para la lectura de acusación y juicio, tras la llegada de la fiscal de distrito de Humacao, Phoebe Isales, se anunció en sala que, mediante consulta con el Departamento de Justicia, no estaban en posición de ofrecerle al imputado lo que habían conversado, por lo que su defensa solicitó regresar al proceso de vista preliminar y anular lo ocurrido en la sala de Serrano Murcelo.
Sin embargo, ante la ausencia de un documento firmado, la jueza Rosario Figueroa, decretó un receso y solicitó el expediente del caso para su evaluación.
Mientras, el fiscal Miguel Ornedo expuso que no procedía revertir el caso sino continuar con la etapa de juicio.
A eso de las 6:30 p.m. se anunció la determinación.
El cantante fue arrestado el 14 de octubre de 2022 cuando su exesposa, Jennifer Fungenzi Jaques, denunció que fue sometida a un patrón de violencia doméstica de parte del imputado, mientras se investigaba un incidente en el que le habían quemado su vehículo y el de una vecina en el complejo Palmas del Mar en Humacao. Las autoridades no lo han vinculado con estos sucesos.
Durante parte de su interrogatorio en la vista preliminar, la exesposa del cantante, la víctima relató varios incidentes violentos en los que alegó que fue golpeada y, según su testimonio, el artista la agarró por el cuello e intentó poner su cabeza en el inodoro.
Además, que irrumpió en su casa y presuntamente disparó, por lo que se encerró con sus hijos.
Luego la llamó por “Facetime” y le enseñó a su perrita mientras le ponía un arma en la cabeza, exigiéndole que fuera al primer piso a hablar con él.
Cuando la perjudicada fue interrogada por la Fiscalía sobre el maltrato emocional que sufría detalló que la denigraba.
Asimismo, indicó que el cantante era “sumamente celoso” y que incluso llegó a romper y quemarle ropa para que esta no la pudiera usar.
Los alegados hechos habrían ocurrido previo a una solicitud de orden de protección solicitada por la mujer.